El aspecto y el ánimo

.

Otra pescadilla más que se muerde la cola, empiezo a pensar que yo todo lo veo de esa forma, pero es que es verdad,. Cuanto puede llegar a influir nuestro aspecto en como llegamos a sentirnos… realmente, una barbaridad.

Pero es que aún es más compleja la cosa, cuando nuestro ánimo está exaltado, cuando estamos por las nubes… que buen aspecto llegamos a tener, con nada estamos espléndidos, y es lógico, la expresión, el brillo de los ojos, la luminosidad de la piel, es que hasta el pelo está mucho mejor (una de mis más tremendas manías) por más que ande a su aire, es que completamente revuelto, no sienta increíblemente bien, y no hace falta que nos prestemos un especial cuidado, nos pongamos como nos pongamos, estamos estupendamente bien.

Pero… que diferente es todo si decae nuestro ánimo, si estamos de repente más cansados, o no nos encontramos del todo bien, aquí la cosa se invierte, casi hagamos lo que hagamos… no terminamos en ningún momento de vernos bien, y entre pocas ganas, y escasos resultados, optamos por abandonarnos a nuestra suerte, y dejarnos llevar por esa corriente…

Y que error más grande, que ganas de poner más difícil lo que ya no es fácil, y si bien está clarísimo que nos costará el doble ponernos manos a la obra y para la mitad del resultado, está igual de claro que los beneficios que obtendremos de este “pequeño sacrificio”, compensarán con creces el esfuerzo realizado…

Y es la opción por la que me decanté hace ya algún tiempo, poco más de un año, de repente recordé aquellos tiempos en que yo era una fiera y me pasaba la vida, trabajando y aún así, no desperdiciaba ni un segundo y salía, y viajaba, y bailaba, y reía… y el truco era simple (bueno, simple, y tener 20 y 30 años) … llevaba el colorete siempre encima, y el lápiz de ojos… y el pintalabios… y cuando me parecía que ya no aguantaba más, y antes de asomarme al espejo…. Me daba un brochazo, y al asomarme me decía a mi misma…

- Pero como no va a poder aguantar más, una tía tan estupenda, con esta cara, con este color y con estos ánimos….

Y algo parecido hago ahora, cuido esos pequeños detalles que si bien pudieran ser solo de fachada, está claro que influyen en el ánimo, y aunque está claro que con eso tampoco me pongo pa “comerme el mundo”, igual de claro está, que si me siento mucho mejor, y que cualquier momento chungo pasa más liviano, y que se lleva más ligero cuando una “se ve” mejor, de forma que definitivamente he hecho unos pequeños reajustes en cuanto a mi rutina en el quehacer diario, y es increíble solo con 10 minutillos el partido que le saco.

.