Que juego tan peligroso tensar en exceso la cuerda que mantiene difícilmente sujeto todo... que atrevimiento andar pisando esa delgada línea que fija el respeto, que atrevido retar una y otra vez a aquel que se contiene por que tiene claro que el siguiente paso a dar no tiene vuelta atrás y no quiere de ninguna de las maneras dar lugar a eso...
Pero todo tiene un límite, y no se puede permitir de forma reiterada lo que ya es más que claro que más que un enfrentamiento, es una "Cuestión de Soberbia"... y una absoluta falta de respeto.
Que mala sensación tener tan claro que tendrá que darse el paso que suponga poner fin a todo esto...
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