En casa...

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Cargada de imágenes, de sensaciones, de olores y de sabores, cargada de cansancio, de euforia de placer y de pena, tan cargada que ni el completo cansancio llega a hacer en mi mella…

¡¡Ya estamos en casa!!... que placer… y que pena…

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La “Cuenta Atrás” empieza…

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Las maletas listas, zanjadas las últimas discusiones y preparadas ya para la espera, revisados mil millones de veces los billetes, añadidos un par de “porsias”…

Y toda nuestra ilusión puesta como cada año en lo que nos espera, no importa ya el esfuerzo último, ni lo que esta vez costó cuadrar destino y fechas, se nos iluminan los ojos de “tantas ganas” y como la primera vez, una risa nerviosa nos “afloja” en cada nuevo comentario sobre lo que será, lo que debe ser… lo que se espera…

Dentro de unas horas… nuestro avión despega…

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Desde mí misma

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Desde mí misma me encuentro según el día, plena o cansada, capaz de acometer titánicas empresas, o completamente incapaz, no pudiendo hacer nada.

Me siento tremendamente feliz, completamente afortunada, o me siento abatida y triste aún cuando no sea por nada.

Desde mí misma me empeño en no rendirme cuando estoy cansada, y es cuando fuerzo realmente el engranaje de esta máquina que es la mente humana, me empeño en levantar el vuelo cuando permanecería echada, y arremeto contra fieros molinos de inmensas aspas.

Desde mí misma adiestro mi mente indisciplinada, la obligo a seguir un orden para mantenerla acallada, o la dejo vagar a su aire… libre, audaz y alocada.

Desde mí misma me aprendo en cada minuto, en cada palabra, y en cada rincón descubro cosas nuevas y tendencias acalladas…

Desde mí misma descubro, sorprendida y encantada, que a pesar de mis múltiples equivocaciones… no estaba equivocada.

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Cuando la vida te haga un envite… no pases… ¡¡Acepta!!

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Llevo unos días fantásticos, es que no hacen más que darme buenas noticias, gente que quiero me cuenta cómo le pasan cosas estupendas, y eso, alegra a unos niveles que es imposible que se consiga de ninguna otra manera…

Y ahora, otra noticia estupenda… y es que las cosas pasan cuando tienen que pasar, cómo tienen que pasar, y por que tienen que pasar… solo hace falta estar atentos, y saber “Aceptar el Envite” cuando la vida nos lo pone en bandeja…

Si hubiera sido a mí a quien le pasara, me hubiera alegrado lo mismo… pero más, imposible que lo consiguiera…

Y es que llevo unos días divinos… que no hacen más que hacerme fantásticos regalos, la gente que quiero y me rodea… y… ¡¡Que caramba!!, que estoy contenta :)

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Y ya falta menos

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Ya iniciamos la cuenta atrás de nuestro anual ritual de preparar la salida a nuestra meta… con las Cervantinas discusiones de “Quién lleva qué” en la maleta…

Y las llamadas continuas de “Oye, te has acordado de…??” o aquellas de “Qué no se te olvide la…” y sobre todo las de “A ver… hagamos bien las cuentas…”

Quedan ya pocos días, y vamos como siempre, Lourdes con todo dispuesto, y yo aún pensando que NO meter en la maleta…

Un estupendo juego, una distracción perfecta, un recordarnos continuamente las ganas de vernos ya dispuestas, ese puntillo de vértigo que nunca nos deja hasta que el avión se eleva, por si hubiera algún imprevisto, algún error, quien sabe por qué, pero… que suspiros de tranquilidad cuando el avión despega…

Y me hace gracia comprobar que después de tantos años repitiendo “faena”, sigamos con los mismos puntos flacos, las mismas manías, las mismas maneras…

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Tesoros

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Sonrió desde lo más profundo, dulcemente, con calma, y esa sonrisa anidó para siempre en su alma, desplazando angustias y tormentas pasadas, no importaba que fuera tan solo por un segundo, el tiempo no importaba, y es que esa sonrisa sería para siempre suya… pasara lo que pasara.

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Elegir

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Elegir es complicado, es un derecho si, y también una obligación, elegir es posicionarse, es decidir un camino, y marcarlo, elegir es un riesgo, y una increíble aventura…

Elegir es un paso que ha de ser meditado, o quizás solo dejarse llevar por la intuición, elegir es casi siempre un paso apretado, un camino de una sola dirección, a veces, algunas veces, encontramos rotondas donde poder dar la vuelta, otras, no existe forma de volver a la inicial dirección, elegir conlleva asumir las consecuencias… elegir es al fin un pequeño paso… con una tremenda proyección, que podemos creer clara y definida, pero que suele tener mucha más trascendencia, más consecuencia…

Elegir es al fin una gran aventura, de la cual las más de las veces, no tenemos esa percepción.

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Preciosa

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Así me siento en este momento, absolutamente preciosa, y es una sensación, increíble de sentir, difícil de explicar…

Me gusta la gente preciosa, es aquella que nos hace sentir cuando la tenemos frente a frente algo especial, no se trata de su hermosura física, aunque por supuesto no estorba, es… es mucho más, es algo que emana, algo que ofrece, es la sonrisa que todo lo da, es ese calor y esa energía que desprende, es esa corriente invisible que nos atrae de forma irresistible, es esa sensación que nos provoca…

Y he descubierto, bueno no, siempre lo he sabido, solo que por circunstancias, había llegado a olvidarlo, que ser preciosos, independientemente de que tenga que ver con nuestro yo íntimo, es un regalo que nos hacen los demás, es un proceso lento, como si de una delicada talla se tratara, y en la que participan aquellos que nos rodean, aquellos que nos quieren, nos van dando forma y nos van cargando de buenas vibraciones, nos van llenando de energía y de luz…

Y de repente, una un día se mira en el espejo, y se siente preciosa… y se sonríe, y aún crece más… y solo puede dar gracias por tener esa suerte, por tener tanta gente capaz de moldearla con tanto cariño, capaz de darle lo más hermoso que se puede dar…

Así me siento en este momento, tiene poco que ver con la imagen que me devuelve el espejo… pero no puede satisfacerme ni una piquita más…

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