Regálame una carta de amor... dulce, apasionada, tierna... regálame una sonrisa abierta, y una mirada certera.
Regálame un silencio intenso, una caricia tenue, sincera...
Regálame ese instante entre el sueño y la vela, donde se abandona el cuerpo y la mentira no existe, ni se insinúa siquiera, donde el cansancio te puede y al dejar de controlar, las almas definitivamente se acercan.
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Regálame un silencio intenso, una caricia tenue, sincera...
Regálame ese instante entre el sueño y la vela, donde se abandona el cuerpo y la mentira no existe, ni se insinúa siquiera, donde el cansancio te puede y al dejar de controlar, las almas definitivamente se acercan.
7 comentarios:
Pura poesia tu texto, lleno de sensibilidad.
q bien me han sentado estas palabras, plenas , de sentimiento
Un texto poético,llano,sincero,directo al corazón.Despojado de cursilerías.Me gustó.
Un saludo desde Chile
Precioso, verdaderamente intenso.
Un abrazo.
Solo puedo regalarte mi amistad.Eres genial
lindo, gracias por postear
Estoy de acuerdo con lavabajillo, pura poesía. Si encuentras alguien así, pregúntale si tiene un hermano gemelo, o mejor dicho, un clon y me lo presentas, ok? Uy qué desilusionada estoy de la raza humana macho...
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