Sin tregua caminas ya demasiado tiempo, sin tregua, sin descansos, sin más ayuda que tu empeño, sin tregua entre batallas de esas que realmente hacen daño, esas en las que se daría la vida por ganar.
Sin tregua, sin premios que recompensen el esfuerzo, por pequeños que fueran, que ayudan siempre a poder continuar, en lugar de estos encuentras cada vez más y más obstáculos, de esos que generan ganas de rendirse sin más.
Sin tregua, sin premios que recompensen el esfuerzo, por pequeños que fueran, que ayudan siempre a poder continuar, en lugar de estos encuentras cada vez más y más obstáculos, de esos que generan ganas de rendirse sin más.
Aún así, sabes de forma intuitiva encontrar resquicios de luz en medio de tu oscuridad, robar y multiplicar la ilusión de un paquete sorpresa, de una botella de vino, de una planta por regar, sabes hacer premio esa cosita pequeña, ese detalle que para otro pasa desapercibido, a pesar de que tu angustia te está empezando a ahogar.
9 comentarios:
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No lo permitas, que esa angustia no te ahogará, acabará retirandose harta de perder la batalla que le has presentado. No te rindas nunca, tu siempre adelante, con la cabeza bien alta y la ilusión como único abrigo de tu piel.
Un besote
Nerim
Si mis malabras te sirven de aliciente, son todas tuyas.
Yo premio tu vida escuchandote y hablandoter. Y si puedo hacer algo más, consideralo hecho.
Un beso
Si algo tenemos es la fuerza de la superviviencia,a veces lo vemos otras no y tambièn muchas veces lo que son obstàculos para unos no lo son para otros,o al menos no tienen la trascendencia de tales,la percepciòn es tan personal,verdad?.Un beso Mìa
A veces los amigos nos dejan sin palabras cuando conocemos realmente su intimidad, cuando descubrimos que son capaces de mantener una sonrisa aún a pesar de tanta adversidad.
Cuantas veces detener lo suficiente la mirada, nos hace que crezcan de una forma desmesurada aquellos que no veíamos tan grandes, y es que estamos rodeados de gente "Grande" de verdad.
Si les dedicamos el tiempo suficiente seguro que incluso salimos ganando, de todo lo que aún sin parecerlo de entrada, nos pueden llegar a dar, solo como inicio, la conciencia de la suerte que tenemos...y eso, ya es de más.
Iba a poner que siempre hay una tregua, una luz al final. Pero leyendo tu coemntario, se me hace que no estás hablando de ti.Y que quizás esa persona no tenga tregua de verdad. comparte con esa persona entonces esos pequeños momentos. Un abrazo
como echaba de menos leerte... como me gusta que estes ahí, Mia...
mi "Pepito Grillo"....
Si bettina,no hablo de mi no, siendo honesta, salvo cuestiones puntuales, como cualquiera, yo soy muy afortunada :)
Como no llevase usted un sable en la mano D.txusman iva a ver por decirme de nuevo Pepito Grillo ja ja ja ;)
Precioso el texto.
Parece que describe mi arranque de verano, momento henchido de trabajo donde no vislumbro otro horizonte esperanzador que las vacaciones y las pequeñas tretas para engañar al agobio, una botellita de vino, un viaje corto, un amanecer.
Curiosamente a pesar de llevar tan poco tiempo por tu blog no lo percibí como autobiográfico.
Saludos.
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